El acné leve es uno de los trastornos de la piel más comunes. Afecta a alrededor del 85% de los adolescentes en mayor o menor grado. Pero también al 25% de las mujeres de más de 25 años. Una rutina de cuidados que combine higiene, hidratación y protección solar es fundamental para los casos de acné leve.
Los especialistas están observando que la anosmia o pérdida de olfato, uno de los síntomas más comunes del Covid-19, es más frecuente entre las personas que se han vacunado. Eso sí, su duración se acorta más en el tiempo y además, las personas que la padecen generan más anticuerpos que el resto de los pacientes.
La pandemia del Covid-19 ha afectado a la salud mental de muchas personas y ha abierto un debate sobre su importancia en los indicadores de salud generales. El 10 de octubre se celebra el Día Mundial de la Salud Mental y hemos querido reflexionar sobre su relación con las enfermedades de la piel.
El acné es una enfermedad de la piel de tipo inflamatorio que habitualmente mejora en verano con la exposición solar. Concluidas las vacaciones, el estrés de la vuelta a los estudios o al trabajo, sumado al mayor uso de la mascarilla en los espacios cerrados, hace que en la mayoría de los casos empeore.
Después de las vacaciones toca volver a la rutina y a retomar hábitos saludables, algo especialmente importante para las personas con enfermedades de la piel como psoriasis, vitíligo, dermatitis…
Las vacaciones de verano van tocando a su fin. El bronceado hace que el vitiligo sea más evidente por lo que te damos 5 consejos si quieres camuflar las manchas blancas.
El sol tiene un efecto antiinflamatorio positivo a corto plazo para las pieles con acné. Eso sí, es imprescindible adoptar una serie de precauciones. De lo contrario, el acné no sólo no mejorará sino que empeorará a medio plazo.
A pesar de no ser considerado como uno de los síntomas más graves, la pérdida de olfato figura entre las consecuencias del Covid persistente.
El sol ejerce un efecto beneficioso sobre la dermatitis atópica por su efecto inmunosupresor. A pesar de ello, factores como el sudor, la sal del mar o el cloro, hacen que en verano haya que tomar una serie de precauciones y cuidados.
Utilizar un factor de protección solar es esencial, pero aún lo es más para las personas con vitíligo, que representan alrededor del 2% de la población.
Sobre el papel, el sol es bueno para las pieles con acné. Eso sí, no hay que descuidarse y hay que mantener las rutinas y cuidados en vacaciones, sobre todo en pieles con tendencia acnéica.
La constancia es esencial para recuperar el olfato en caso de pérdidas temporales. A pesar de que en verano nos relajamos con muchas obligaciones, es importante mantener el entrenamiento olfativo para obtener resultados.
El bronceado asociado al verano hace que las manchas blancas en la piel sean más visibles. Tanto si tienes vitíligo como si las manchas están producidas por otros motivos, como el envejecimiento de la piel o la hipomelanosis en gotas.
A pesar de que la exposición solar es positiva para el 80% de los casos de psoriasis, el sol aumenta la sequedad de la piel y algunos tratamientos tópicos pueden producir fotosensibilidad en estos pacientes.
Las investigaciones sobre la pérdida de olfato por el coronavirus siguen avanzando. Según los resultados de un estudio recientemente publicado en la revista Science Translational Medicine, la infección de las neuronas olfativas por el Covid-19 podría constituir la puerta de entrada del coronavirus al cerebro.
A las puertas del Día Mundial del Vitíligo (se celebra el 25 de junio), te ayudamos a aclarar algunas dudas en torno a esta enfermedad de la piel.
El acné es una de las patologías de la piel más extendidas, no sólo en la adolescencia sino también en la edad adulta. Precisamente por esto existen numerosos bulos y remedios populares para tratar el acné. Desmentimos algunos de ellos.
El 13 de junio se celebra el Día Europeo de la Prevención del Cáncer de Piel con el punto de mira puesto en la importancia de la detección precoz. La situación generada por el Covid-19 ha provocado un retraso en los diagnósticos.
